“ADIÓS AL MITO DE LA CORTA VIDA ÚTIL DE LOS COCHES ELÉCTRICOS”

Las baterías de los coches eléctricos ofrecen cada vez una mayor durabilidad, y hoy en día superan la vida útil del propio vehículo. Desde que llegaron al mercado los primeros coches eléctricos modernos hace quince años, una de las principales preocupaciones de los usuarios ha sido el posible envejecimiento prematuro de las baterías, el elemento más caro en este tipo de vehículos.

Sin embargo, los nuevos sistemas de gestión de baterías BMS (Battery Management System) han permitido crear packs capaces de superar la vida útil del propio automóvil. Atrás quedan los problemas de degradación experimentados por algunos modelos de vehículos eléctricos; de hecho, a día de hoy la mayoría de fabricantes ofrecen una garantía para las baterías de 8 años. Algunos fabricantes como Toyota llegan incluso a los 10 años.

Aun así, la fiabilidad de las baterías suele utilizarse para atacar a los vehículos eléctricos. Un estudio en el que se analizó el estado de las baterías de casi 5000 coches eléctricos determinó que las baterías de los vehículos eléctricos se degradan de media un 1,8% anual. Esta cifra se reducirá aún más con los nuevos modelos y la mejora de la tecnología de las baterías, por lo que la mayoría de baterías durarán más que la vida útil del vehículo, 20 años o más, y no será necesario sustituirlas nunca. Por ello, la gente debería tener la seguridad de que muchos de los coches eléctricos actuales son adecuados para reemplazar a una amplia variedad de vehículos con motor.