De la mano del coche Nuro R2, la semana pasada Domino’s Pizza realizó en Houston las primeras entregas a domicilio de sus pedidos de manera completamente autónoma, sin conductor.
Nuro fue fundada por ingenieros de vehículos autónomos que antes estuvieron trabajando en los proyectos de conducción autónoma de Google, y es una de las múltiples empresas que buscan utilizar vehículos autónomos para entregas de última milla, uno de los campos donde más sentido cobra este tipo de conducción. Y es que a corto plazo este tipo de funciones se encuentran entre las más viables dada la temprana fase de desarrollo en la que se encuentra esta tecnología, pues la conducción autónoma se aún no se antoja lo suficientemente segura como para practicar el transporte de pasajeros.